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Actualidad |
29/02/2016 |
LOS AÑOS BISIESTOS COMO EL 2016 - ALGO DE HISTORIA |
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Desde el punto de vista astronómico y calendario debemos decir que el movimiento de la Tierra alrededor del Sol, cuando completa su órbita nuestro planeta ha rotado 365,24219, por lo tanto un año dura 365 días, 5 horas, 48 minutos y 56 segundos y no como popularmente se dice con números naturales 365 días.
Fue al emperador romano Julio César a quien se le ocurrió crear el año bisiesto para así cada 4 años regularizar esa diferencia que se va acumulando anualmente, para luego empezar un nuevo ciclo.
Como se sabe el calendario debe corresponderse con una realidad climática y si no se hubiera procedido a incorporar este día adicional cada 4 años, las características meteorológicas que se presentan en cada una de las estaciones (verano, otoño, invierno y primavera) con el transcurso de los años el otoño del hemisferio sur o viceversa se transformaría en primavera o más gráficamente el verano del hemisferio sur o viceversa se transformaría invierno, al cabo de unos 700 años
Recién fue en el año 44 AC que se introdujo esta modificación al adoptar los romanos el calendario Juliano (basado en el movimiento del Sol), momento en que se determina que los meses tendrán 30 y 31 días y febrero 28.
Posteriormente en el año 1582, el calendario gregoriano (promovido por el papa Gregorio XIII) sustituyó al juliano y ajustó un poco más el desfase que todavía existía con el calendario juliano añadiendo excepciones a los años bisiestos, por ejemplo que no lo serán los años múltiplos de 100, salvo que también sean divisibles por 400.
Con la precisión que tiene la tecnología actual, se ha podido determinar que anualmente existe un desfase de unos pocos segundos, por lo cual, para que se vuelva a acumular un nuevo día se hará necesario que transcurran más de 3.200 años.
2016-02-29 Redacción Ciudad Krypton Digital. |
EL ENCUENTRO DEL PRESIDENTE MACRI CON SU SANTIDAD FRANCISCO |
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En columnas anteriores ya publicadas en nuestro espacio periodístico destacamos que quienes durante algunos años en la política doméstica Argentina se hallaban insólitamente enfrentados, me refiero al cardenal Jorge Bergoglio y a la ex presidente Cristina Fernández de Kirchner, teniendo un ideario común, pero a partir de la asunción del primado nacional como el jefe de la Grey Católica, aquél distanciamiento desapareció y ambos jefes de estado salieron fortalecidos en sus misiones, pues ellos fueron los paladines que denunciaron a los centros financieros que manejan los destinos del mundo acrecentando las riquezas cada vez en menos manos y consecuentemente encontrar a media humanidad bajo los niveles de una pobreza medianamente digna.
Y sus figuras entonces pasaron por los organismos internacionales denunciando las prácticas financieras que privilegian el lucro antes que las personas, el individualismo antes que la solidaridad, lo material antes que lo espiritual y fundamentalmente puntualizando que las políticas del neoliberalismo lo único que provocan son mayores desigualdades y previsibles convulsiones sociales. todas estas ideas fuerza son en verdad banderas comunes del cristianismo en su versión católica y el peronismo que nace de los principios rectores de las encíclicas papales del siglo pasado y por ende no podía ser ajeno al kirchnerismo cuyas políticas han sido de neto corte populista privilegiando a los sectores más necesitados.
Y entonces a muchos les llamó la atención que el Papa recibiera con alegría en más de una oportunidad a la ex presidente de los argentinos en el vaticano y pese al blindaje mediático sus voces se hicieron sentir en contra de las políticas de los banqueros responsables de diseminar la pobreza en casi todos los confines del mundo, en especial, en los países subdesarrollados, a los cuales lejos de asistirlo con créditos para su crecimiento, lo que hacen en verdad es darles pautas para sus políticas económicas que le permitirán a determinados grupos incrementar sus rentas, endeudando cada día más a los países que aceptan este tipo de imposiciones.
Pero toda esta larga introducción la hemos realizado porque el Papa Francisco le concedió una entrevista de tan solo 22 minutos al nuevo presidente de los argentinos el ingeniero Mauricio Macri, cuyos asesores desde su propia asunción intentaron que el mandamás de Cambiemos se sacara una foto con Francisco.
Pero llegar a este encuentro no fue fácil para las nuevas autoridades, porque ellas adolecen de capacidad en casi todas las áreas de gobierno, no siendo una excepción el Ministerio de Relaciones Exteriores de la Nación que hace pocos días designó sin el previo acuerdo del vaticano a Eduardo Pfirter como nuevo embajador del país ante la Santa Sede.
En los corrillos de la diplomacia dicen que el nombramiento de una persona de las características de Pfirter por demás arrogante molestó grandemente al Papa argentino y mucho más por no habérsele consultado previamente para tal designación.
Otra de las cuestiones que el oficialismo soslaya pero que el Papa tiene muy en cuenta es el caso de la dirigente Milagro Sala líder de la Organización Barrial Tupac Amaru, una presa política casi por decreto del gobierno provincial jujeño, quien en principio la acusó de ser la cabecilla de una protesta social y luego de liberarla en los papeles, luego la continuó dejando entre rejas por supuesta malversación de fondos. No hay que olvidar que además de recibirla por un período mucho más extenso Francisco le envío a la luchadora social un rosario.
Además de la tan ansiada foto familiar con Francisco, al presidente Macri lo esperaba en la entrada del lujoso hotel en que se alojó, un grupo pequeño de compatriotas que le exigió la libertad de la jefa de la Tupac Amaru y el cese de las políticas de ajuste.
Según un comunicado de prensa del Vaticano muy lavado “se trataron temas de mutuo interés, como la ayuda al desarrollo integral, el respeto a los derechos humanos, la lucha a la pobreza y al narcotráfico, la justicia, la paz y la reconciliación social".
28-02-2016 Luis Alberto Mello
Coordinador Buenos Aires - Ciudad Krypton Digital. |
DISOLUCIÓN DEL AFSCA Y EL AFTIC: PRIMER ROUND A FAVOR DEL OFICIALISMO EN EL CONGRESO |
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Durante más de un lustro después de sancionada la Ley de Medios Audiovisuales 26522, mediante utilizándose un set de argucias judiciales, llámense apelaciones, amparos, etc. el sistema republicano no pudo implementarla en su totalidad pese a haber sido declarada constitucional por la Corte Suprema de Justicia.
Con la asunción del nuevo gobierno que sin duda aboga por los intereses corporativos mediáticos y tiene en su plantel una buena parte de agentes del multimedio afectado por la precitada Ley, mediante un decreto de necesidad de urgencia (DNU), estableció la caducidad de estos entes autárquicos, situación por demás irregular conforme la opinión de buena parte de los juristas nacionales.
Además de lo estrictamente legal que puede ser opinable, esta disposición se cuestionaba desde lo ético e institucional dado que el congreso nacional se encontraba y encuentra aún en receso, pero como sabemos las tareas en dicho poder no se inician estrictamente cada 1º de marzo, sino que previamente se reúne regularmente la Comisión Bicameral Permanente de Trámite Legislativo, la cual con los votos del macrismo y el Frente Renovador emitió un dictamen favorable para la creación deL “Ente Nacional de Comunicaciones” bajo la órbita del Ministerio de Comunicaciones, organismo propuesto para reemplazar al AFSCA y la AFTIC.
Este nuevo organismo absorberá las atribuciones del AFSCA y la AFTIC y se espera crear una comisión para la elaboración del proyecto de ley que reforme, actualice y unifique ambas leyes.
Conforme el comunicado emitido por la Comisión Bicameral, Los legisladores señalaron “la necesidad de implementar, de manera inmediata y eficaz, un marco legal convergente y homogéneo que contemple por igual —y en forma adecuada—a los servicios audiovisuales y a las comunicaciones bajo la órbita de un ente único de control (Enacom)”.
“A ello debe agregarse que ambas leyes regularon de manera diferente y desacertada todo lo que debía ser objeto de un mismo ordenamiento legal —y sometido por ende a una misma autoridad de control— lo que produjo efectos regresivos y perjudiciales al proceso de convergencia”, sostiene el dictamen, por lo que ambas leyes promovieron “un deterioro creciente de la competitividad y capacidad de desarrollo del sector que se vio reflejado en el retraso de las inversiones en infraestructura de redes de comunicación y la baja calidad de los servicios”.
Para muchos que no comulgan con esta visión amañada de autoritarismo que invoca la libertad de expresión, negando la influencia que tienen las corporaciones en la vida cotidiana de los pueblos, solo les resta que dichas propuestas sean rechazadas en los plenarios de ambas cámaras, una quimera si vemos el comportamiento de muchos legisladores provinciales preocupados por los problemas financieros de sus terruños que a cambio de un poco de oxigeno por parte del gobierno nacional, seguramente apoyarán esta propuestas y otras del mismo tenor, lo que representará para todos los argentinos un retroceso importante en la democratización de las comunicaciones.
26-02-2016 Redacción Ciudad Krypton Digital. |
SIGUEN LOS DESPIDOS INJUSTIFICADOS EN LA ADMINISTRACIÓN PÚBLICA |
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El liberalismo vernáculo tiene la característica de querer ser más papista que el Papa y sigue a raja tabla un libreto. Dentro del decálogo liberal se afirma que el estado debe ser reducido a la mínima expresión y que no debe inmiscuirse en cuestiones económicas, ya que es el mercado quien libremente debe pautar el destino de las personas, aceptando como natural, la pérdida de fuentes de trabajo, la flexibilización de las condiciones laborales, la caída de salarios y hasta el sector financiero privado debe decidir sobre nuestro futuro administrando las jubilaciones y pensiones, no sin antes hacer pingües ganancias.
Así las cosas, no sorprende que en la Administración Pública Nacional, Provincial y Municipal, se hayan producido miles de despidos arbitrarios, ilegales, persecutorios e innecesarios, invocándose la existencia de “ñoquis, vagos o camporistas” para intentar justificar un accionar que muestra crudamente cual es la ideología imperante: un neoliberalismo que olvida por completo a la familia, a los intereses nacionales y el bien común.
Lamentablemente muchos compatriotas han creído que durante el gobierno kirchnerista el estado ha sido solamente un refugio de militantes pagos que no trabajaban y que estos elementos deben ser extirpados de la administración pública, para terminar con la corrupción y bajar el déficit existente en las cuentas como consecuencia del sobredimensionamiento del estado.
Al respecto, digamos que hace pocos días circuló un estudio que reseñaba que la cantidad de empleados públicos en nuestro país está por debajo del estándar internacional y en el informe no se consideraba la superficie de los países por lo cual, la relación de empleados estatales en función del número de habitantes justificadamente debería ser más alta que la actual.
Se dice que el estado desde el año 2000 aumentó su plantilla en 800.000 agentes, pero lo que no se dice es que al asumir el kirchnerismo prácticamente estaba desahuciado, que se tuvo que recomponer todo desde cero, se volvió a administrar el agua, Aerolíneas Argentinas, se fomentó la investigación y el desarrollo, se repatriaron más de 1500 profesionales, que se abrieron 19 universidades estatales, se construyeron 2000 escuelas, se relanzó el CONICET, se pusieron en órbita 2 satélites, se empezó a reconvertir la industria ferroviaria, se jubilaron a más de 3.000.000 de ancianos, tuvo que crecer por ende la cantidad de empleados y prestaciones, etc. etc. y ahora resulta que todo ese esfuerzo y consolidación de las funciones estatales debe ser destrozado literalmente y para ello lo primero es echar gente a la calle.
No solo es lamentable la política de despidos en los organismos estatales, sino también altamente cuestionable la metodología que se utiliza para determinar quienes serán las víctimas. Eso sí, desde el oficialismo no se habla de “despidos” sino que solo se trata de contratos que no se renuevan, este ha sido el caso de Mariana Torres, una trabajadora del Instituto de Previsión Social (IPS) que además es periodista, que ingresara a dicho organismo en el año 2011 desarrollando sus tareas en La Plata, sin embargo, a partir del año 2013 se muda a Tandil, por lo cual, fue trasladada a la delegación de Juárez, sita a 80 km de su residencia, es por ello, que diariamente la colega debía viajar 160 Km. diarios para cumplir con sus tareas habituales.
Pero lamentablemente una mano negra puso su nombre dentro del bolillero y recibió el telegrama que adjuntamos donde se invocan “razones de servicio”, de nada sirvieron casi 3 años viajando 160 Km para ir a trabajar. Injusticia Total….
Si algún lector quiere conocerla y ver como viajaba cotidianamente a prestar sus tareas en el IPS, acceda al link que sigue: http://www.laopiniondetandil.com.ar/wp-content/uploads/2016/02/12777020_1955360568022728_1731815946_n.mp4?_=1
24-02-2016 Redacción Buenos Aires - Ciudad Krypton Digital. |
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