:: Actualidad
08/04/2013
DRAMA EN LA CABA, EL GRAN BUENOS, LA PLATA Y ALEDAÑOS

Sería necio pensar que la responsabilidad de todos los infortunios que ha acarreado la presencia de las últimas lluvias la tienen los gobernadores, el jefe de gobierno de la CABA o los intendentes de la Provincia de Buenos Aires.

Estas precipitaciones impiadosas como todos los cataclismos naturales han golpeado fuertemente a buena parte de nuestros hermanos, llevando su desgracia a hogares ricos, de clase media y pobres.

Miles de viviendas, automóviles, artefactos eléctricos, muebles, colchones, instalaciones, maquinarias, fábricas, pequeños comercios, bibliotecas, colegios, orfanatos, etc han sido destruidos (podríamos seguir enumerando elementos) y como si esto fuera poco: también han perdido la vida unos 50 inocentes que no tuvieron la suerte de sortear el esperado meteoro.

Esta introducción no ha pretendido deslindar las responsabilidades de la clase política siempre renuente a invertir fondos en obras de infraestructura necesarias como el "agua" para las cuales generalmente o no existen fondos disponibles o si los hay se los aplica para otras cuestiones menores que "venden más" que le brindan a los mandamases una "mejor imagen" frente al potencial electorado.

Con esta visión egoísta al frente de la cosa pública encontramos que se privilegian carreras de "Súper TC 2000" antes que aumentar la dotación de camas, médicos y enfermeros en los hospitales públicos de la ciudad; que se invierten fortunas para bicisendas "para pocos" en lugar de mejorar el mantenimiento y construir nuevas escuelas en el olvidado sur de la ciudad; que se destina una buena cantidad de fondos del presupuesto para promover la acción pública en lugar de realizar una administración transparente y austera, etc. etc. Y así podríamos continuar la lista hasta el infinito.

En estas horas de dolor colectivo donde para muchos las pérdidas materiales que han sufrido han sido totales, pareciera hasta irreverente entrelazar unas ideas en torno a como se capta la adhesión del pueblo para acceder al poder político, situación que por ejemplo los radicados en la CABA no deberíamos olvidar.

Solo por un momento queremos discurrir ahora muy elementalmente acerca de la metodología propagandística utilizada por ejemplo por el PRO capitalino (con Durán Barba de por medio). Al respecto, digamos:


1.- Que merced a la desgracia que se produjo en el boliche "Cromagñon" el ingeniero Macri pudo timonear la salida del ex Jefe de Gobierno Aníbal Ibarra, el interinato de Telerman y su posterior elección como Jefe metropolitano, sin olvidar que también para ello contribuyeron los medios dominantes que apoyaron indisimuladamente la candidatura del hombre del grupo SOCMA, presentado como un hombre de dinero preocupado por el futuro de los "vecinos".

Sin embargo, durante su refrendada gestión por la falta de controles estatales ya fueron varios los "mini Cromagñon" que se han producido y eso porque la suerte ha contribuido a para que no se multipliquen las catástrofes evitables, como por ejemplo la caída de techos en confiterías bailables o el periódico derrumbe de edificios en construcción o linderos a nuevos proyectos, etc, etc. Todos estos sucesos minimizados por la prensa adicta.

2. El otro "slogan de campaña" que al macrismo ha utilizado para llegar a administrar la ciudad con el presupuesto más alto del país, por ejemplo ha sido el graffitti institucional que se expone en la imagen adjunta que dice: "ESTARÍA BUENO NO INUNDARNOS CADA VEZ QUE LLUEVE. PORQUE ASI NOS ESTAMOS AHOGANDO EN UN VASO DE AGUA".

FIRMADO: PRO.

Hasta el momento que escribo esta nota ya son 6 los muertos en la CABA y no estamos haciendo partidismo, solo comentando como las campañas publicitarias sacan y ponen a hombres en los gobiernos, afortunadamente la acción política posterior o desgracias como la presente, se encargan de quitarles sus antifaces.

MI AMIGO TOTO ESTÉVEZ

En el devenir de nuestra historia como nación ya libre, siempre existieron episodios y/o personajes que dividieron las aguas del pensamiento: Moreno-Rivadavia, Dorrego-Lavalle, Federales-Unitarios, Rosas-Mitre, Hipólito Yrigoyen-Francisco de Alvear, El eje-La democracia, Braden-Perón, Perón-La revolución libertadora y llevado esto a terrenos más amistosos y populares, en el fútbol tenemos el: Boca-River, Menottistas-Bilardistas, etc. parcialidades casi siempre irreconciliables.

No puede excluirse de esta lista de eventos el golpe militar del 24/03/1976, que también dividió aguas, aunque afortunadamente gracias a la elogiable política en materia de DDHH del kirchnerismo (sin muchos pergaminos previos en la materia), se rescata esa triste fecha y se la declara feriado nacional con actos conmemorativos que contribuyen a que el pueblo no olvide tan nefasto suceso.

Creo que hoy día por suerte sólo quedan algunos elementos residuales para nada representativos de ese sentir castrense anti-pueblo que añoran los tiempos de este tipo de botas. Podríamos decir que con la irrupción de la junta militar continúa la segunda etapa de la mal llamada revolución libertadora intentando socavar con la instauración del liberalismo económico el modelo de país encarnado por Evita y Perón, en el cual hay pleno empleo y justicia social. Retirado el proceso militar la libertadora sigue viva con la asunción del alfonsinismo y concluye su obra con la llegada al poder de Carlos Menem que destruye el estado nacional dejando todo a expensas de las fuerzas del mercado libre….

Como se podrá apreciar, en este análisis he salteado un evento muy caro para los argentinos: el 2 de abril fecha en que se recupera simbólicamente las islas Malvinas, acto que es tan polémico como los antagonismos antes mencionados. En mi criterio, como las anteriores, todas las consideraciones son válidas y opinables.

Durante la contienda bélica recuerdo que nuestra familia se pasaba las 24 hs. escuchando onda corta para conocer la verdadera situación por la que se estaba atravesando, nunca pude entender ni hoy casi 30 años después como en la Capital Federal, todo seguía igual: boliches abiertos, cines abiertos, confiterías abiertas, teatros abiertos, fútbol los domingos, carreras, clases, todo igual. Mientras que en el sur se combatía, aquí la mayoría de los habitantes estaban en otra, algo así como que los acontecimientos correspondían a otros pueblos.

Nunca sabremos con exactitud los móviles que llevaron a la junta militar a tomar la decisión de desembarcar en Malvinas. Una hipótesis que puede considerarse aceptable pero insuficiente, es que la acción armada se lleva a cabo en función del descontento social reinante en especial en la clase trabajadora que 72 hs. antes se movilizó hacia la casa de gobierno siendo brutalmente reprimida por las fuerzas del orden.

Ya todos sabemos el desenlace final que tienen todas las guerras, que no es otro que muerte y mas muerte. De esta llaga humana quiero tan solo rescatar dos aspectos que estimo pueden evaluarse como positivos: 1) Que nos dimos cuenta en carne propia como opera el imperialismo colonialista asociado con la casa blanca 2) El valor de los soldados que combatieron frente a uno de los ejércitos más poderosos de la tierra, haciéndolo en inferioridad de recursos bélicos (cuantitativa y cualitativamente hablando) y sin la formación militar mas elemental.

El término soldados incluye también a los muy profesionales e intrépidos aviadores que ofrendaron sus vidas en misiones casi suicidas y a algunos oficiales que hicieron honor al mandato sanmartiniano, como fue el caso del TENIENTE 1º TOTO ESTEVEZ.

¿Pero quien fue Toto?. Al igual que el que escribe ambos nacimos en la colorada tierra misionera. Fuimos además a la misma escuela. Vivíamos en la calle San Lorenzo uno frente al otro. Largas horas pasaba yo en su casa junto a su familia constituida por su padre, madre y 5 hermanas mayores.

Por aquellos tiempos, nadie iba a las salitas; ni al jardín; ni al preescolar. Eran nuestros padres los que nos enseñaban a leer, mucho antes de iniciar la escuela primaria y no como ahora que se termina de aprender a leer en el 3er. o 4to. grado. Tampoco teníamos internet ni la inseguridad de hoy día, por eso nuestras amistades eran cara a cara sincera como la de los niños de esos años, no había espacio para otra cuestión que no sea gozar de nuestra etapa infantil. Nuestro desafío era poder jugar, no importa con que cosa o juguete ni tampoco nos desesperábamos por tener y exhibir a los restantes niños que teníamos lo último de lo último. Por ese entonces, muchos de nuestros juguetes habían sido utilizados por nuestros padres y/o abuelos y eran ellos nuestra herencia mas preciada.

Jugar a la bolita, al hoyo, al cinco, a la mancha, a las escondidas, tener el álbum de figuritas de los equipos de Buenos Aires, cuyas formaciones conocíamos de memoria, jugar picados de fútbol con pelotas Nº3 con tiento (luego las de goma), al trompo, a la pandorga, construir diques de arena y arcilla en las cunetas, y ya mas grandecitos con ayuda de nuestros viejos hacer posible que se disponga de un karting (así lo llamábamos) a un carro de madera con engranajes de rulemán como ruedas, jugar a tarzán, leer las revistas de superman y Batman y la de los superhéroes de la editorial Novaro de México y nos las prestábamos para que todos pudiésemos disfrutar de su lectura o bajo las lluvias torrenciales correr sobre los charcos de agua descalzos.

No había entre nosotros nada que nos dividiera nos sentíamos todos iguales a la hora de compartir los elementos, sin egoísmos, sin envidias, sin preconceptos, sin desconfianza, no solo yo creo que todos los chicos éramos sin duda FELICES EN NUESTRAS VIDAS Y DE IGUAL MANERA EN NUESTROS JUEGOS, no había divorcio alguno entre nuestra vida hogareña y la que compartíamos con nuestros amiguitos.

Por ese entonces ya, el querido Toto se diferenciaba del resto por ser aficionado sobre todo a dos cuestiones: ir a la catedral al grupo parroquial (estábamos a 3 cuadras) y a jugar largas horas a los soldaditos (tenía cientos), su mayor disfrute era armar “teatro de operaciones” llenos de obstáculos para las fuerzas, a su paso siempre aparecían montañitas inaccesibles, selvas impenetrables, ciénagas, fortalezas reforzadas, caminos quebradizos, es decir, todo lo que pudiera impedir el avance de las tropas hasta los objetivos. Recuerdo que sorteábamos la composición de los ejércitos y luego las armas auxiliares, tanques, ametralladoras, morteros, etc. luego cada uno ubicaba sus tropas conforme su parecer para iniciar la supuesta guerra.

Por cierto con la luz que me daba mi cerebro intentaba hacerle frente a las fuerzas de Toto, sin embargo no había táctica ni estrategia que lo venciera, el ganaba los enfrentamientos a razón de 5 x 1, siempre se aparecía con alguna novedad, a veces ante tantas derrotas pensaba yo que lo ayudaba su padre, pero no era así, siempre se destacaba en lo que mas le gustaba. Esas derrotas y esos triunfos a ambos nos ponía bien, lo que mas nos importaba era jugar hidalgamente sin trampas.

No existían a esa edad temas ideológicos que nos separasen como creo que pasó con el correr de los años, en esos momentos de comunión ya irrepetibles lo único que nos interesaba era divertirnos y ser leales entre ambos.

Pero como todo lo bueno nada es eterno, la llegada al mundo de mi hermano Carlos nos hace mudarnos a Buenos Aires. Cómo cambió el mundo para mi de un día para otro. En los primeros tiempos los pibes de la cuadra se reían porque yo salía a la vereda en patas, allá en misiones solo usábamos los sport para pasear todo lo demás lo hacíamos descalzos y las burlas para nada maliciosas de los chicos del nuevo barrio, me transportaban a diario a Posadas, sólo pensaba en Pedrito, Ajó y siempre en Toto. Así pasaron los años los caminos de la vida nos separaron pero los recuerdos aunque decayeron jamás dieron lugar al olvido.

Pero como los salmones, los provincianos siempre tendemos a volver a nuestro terruño natal y es por eso que allá por los años 90, tuve la imperiosa necesidad de reencontrarme con mis afectos de la niñez volví tan solo para reencontrarme con mis ex maestras de la Escuela Domingo Faustino Sarmiento y mis amigos de la infancia. Volví a caminar por las mismas calles que me vieron crecer y por las que transité en los años 60, pero la casa de Toto ya no era de Toto, allí estaba ahora el consulado paraguayo, tampoco los hermanos Ábalo ya no vivían en la misma casa. Sólo pude encontrar al ahora contador Marcelo, a quien siempre recordaba porque a él -unos años antes que a mí. la vida le había obsequiado un hermanito diferente que prácticamente vivía oculto, pero al que yo conocí…un hermanito muy parecido a mi hermano Carlos que fue la razón por la cual mi padre resolvió que nos mudáramos a Buenos Aires.

Bueno, ya casi a la tardecita luego de pasar por las dos plazas mas importantes de la ciudad, es que me dirigía para la vieja terminal de ómnibus de Posadas, que antes parecía encontrarse a varios kilómetros de distancia, pero que ahora estaba ahí nomás. Iba soñando despierto pero cansado de tanto caminar, por lo cual, me detuve y procedí a sentarme en el banco de una placita. Grande fue mi sorpresa cuando al girar la cabeza casi atónito leo: “PLAZOLETA TENIENTE 1º TOTO ESTEVEZ”. Me alegré en principio al leer su nombre pero inmediatamente me di cuenta que seguramente ya no estaría con nosotros. En unos segundos pasaron por mi mente miles de preguntas, una de ellas me atrapó: ¿Habrá muerto Toto en Malvinas?.

Sin mas le pregunté a unos parroquianos del lugar que había pasado con la vida de Toto, enterándome en ese momento que él como otros tantos misioneros había muerto en Malvinas combatiendo como un héroe. ¡No esperaba menos de Toto!, recordé nuestra infancia común y se me anudó la garganta (como cuando escribo estas líneas) para luego llorar como cuando éramos niños.

Vuelto a Buenos Aires, busqué y busqué datos de la familia Estévez hasta dar con el teléfono de una de sus cinco hermanas. Con ella me enteré de gran parte de su vida y como aconteció su heroica muerte en Malvinas.

Por su formación militar dogmática, los momentos de la república que se vivían en los 70 y su catolicismo ultramontano, de haber continuado nuestra relación posiblemente hubiéramos discutido en términos políticos, pero en el interior de nuestra alma creo que ambos seguiríamos dispensándonos el cariño fraternal de siempre, eso es lo que a mi 45 años después me importa. Porque volviendo a Malvinas, al momento de la batalla de ponerle el pecho a las balas, seguramente íbamos a hacer ambos la misma cosa y defenderíamos el mismo sentir, pero fue su sangre misionera y argentina la que regó el suelo malvinenses y no la mía, yo estaba preocupado pero lejos del infierno, mientras él perforado como un queso gruyere por el ataque británico ordenaba a sus soldados la retirada, quedándose con todo el arsenal disponible para afrontar su última batalla, la batalla que lo ha inmortalizado mas allá de la muerte.

Yo que lo conocí un poco bastante podría agregar que mientras su cuerpo lo abandonaba su alma estaba orgullosa y feliz. Él nació para vivir y morir como un soldado y así lo hizo. No como el General Menéndez Gobernador defacto de las Islas, que ante la superioridad inglesa, no tuvo problema alguno en rendirse ante las tropas imperiales sin disparar un solo tiro. Qué distinto hubiera sido su recuerdo si hubiera entregado su vida con honor en el campo de batalla, pero no fue así, el General seguramente estaba aburguesado, acostumbrado por ese entonces a realizar operativos descomunales para asesinar a supuestos subversivos era mucho mas fácil y lo hacían en nombre de la patria, incluso cuando como forajidos tomaban por asalto los bienes de los caídos en desgracia.

Por eso y mucho mas, recuerdo con cariño a Toto mi amigo, quien previendo quizás su irremediable destino, dejó una carta post mortem para su padre, la que a continuación transcribo:

CARTA DEL TENIENTE 1º TOTO ESTEVEZ HÉROE DE MALVINAS, A SU PADRE:

Querido Papá: Cuando recibas esta carta yo, ya estaré rindiendo mis acciones a Dios Nuestro Señor. El, que sabe lo que hace, así lo ha dispuesto: que muera en el cumplimiento de la misión. Pero fijate vos ¡qué misión! ¿No es cierto?

¿Te acordás cuando era chico y hacía planes, diseñaba vehículos y armas, todo destinado a recuperar las Islas Malvinas y restaurar en ellas nuestra Soberanía? Dios, que es un Padre Generoso, ha querido que éste, tu hijo, totalmente carente de méritos, viva esta experiencia única deje su vida en ofrenda a Nuestra Patria. Lo único que a todos quiero pedirles es:

1º) Que restauren una sincera unidad en la familia bajo la Cruz de Cristo;
2º) Que me recuerden con alegría y no que mi evocación sea la apertura a la tristeza, y muy importante,
3º) Que recen por mí.

Papá, hay cosas que, en un día cualquiera, no se dicen entre hombres pero que hoy debo decírtelas:

Gracias por tenerte como modelo de bien nacido, gracias por creer en el honor; gracias por tener tu apellido, gracias por ser católico, argentino e hijo de sangre española, gracias por ser soldado, gracias a Dios por ser como soy y que es el fruto de ese hogar donde vos sos el pilar. Hasta el reencuentro, sí Dios lo permite.

Un fuerte abrazo. Dios y Patria o ¡”Muerte”!.

Roberto.

En vísperas de un nuevo 2 de abril digo que recordar a Toto, es recordar a todos los compatriotas que dieron su vida por la patria; es recordar a los cientos de mutilados que volvieron al continente escondidos por las fuerzas armadas; es recordar a los valerosos aviadores fallecidos en combate cuya actuación es hoy estudiada en las academias militares del mundo; es recordar a los que después de volver fueron ya diferentes aunque no hayan participado en enfrentamientos con el enemigo; es recordar a los que no pudieron soportar tanto peso encima y se suicidaron y es recordar también a las madres de los soldados que al igual que las madres de plaza de mayo, siguen estando orgullosas de los hijos que parieron.

LUIS ALBERTO MELLO

LAS NUEVAS DOCENTES CONTRATADAS PARA MOTIVAR A LOS JOVENES Y NO TAN JÓVENES QUE DESEEN PERFECCIONARSE EN EL JUEGO CIENCIA
PD: Chiste machista.
LAS MALVINAS SON ARGENTINAS

Vaya paradoja ser simpatizante de un club de fútbol que lleva el nombre de un súbdito británico pero rebelde como buen irlandés y que cooperara grandemente para la emancipación de nuestra patria.

El 18 de abril de 1810 con la fragata "Jane", de su propiedad, arribó a Buenos Aires en gestión comercial y permaneció dos meses en la entonces capital del Virreinato, siendo testigo de la gloriosa semana de Mayo.

Años después, en la Banda Oriental dominada por los marinos realistas, Brown luchó contra ellos. Apresó la goleta "Nuestra Señora del Carmen" y la balandra "San Juan de Ánimas"; intentó abordar con un bote y veinte marineros al bergantín de guerra "Cisne", y transportó también armas, víveres y oficios del gobierno de Buenos Aires a los patriotas de la Banda Oriental. Era pues un militante de la causa de Mayo, cuando en marzo de 1814 el Directorio le confirió el grado de Teniente Coronel y lo puso al frente de la escuadra para que defendiese la libertad y el honor argentino.

El 1º de marzo de 1815 Posadas firmó el decreto por el que era designado Guillermo Brown, Teniente Coronel y Jefe de la Escuadra. Aquel momento señalaba una hora decisiva en el glorioso destino de la marina de guerra argentina y de quien sería entonces y para siempre su Almirante inmortal.

Martín García, la isla que estaba en poder de los realistas, fue bautismo de fuego para nuestra fuerza naval. El 11 de marzo de 1814 Brown inicia un ataque que es rechazado y vuelve a reanudarlo el día 15, culminando la acción con la toma de la isla.

Las fuerzas realistas que mandaba el Capitán de Navío Jacinto de Romarate se retiran aguas arriba del Río Uruguay derrotando en el Combate de la China a una pequeña fuerza naval que Brown había mandado en su persecución, acción que tuvo lugar el 28 de marzo de 1814 y en la cual halló heroica muerte el Teniente de Marina Miguel Samuel Spiro.

Fragata Hércules

El genio estratégico de Brown vislumbra que una acción naval contra Montevideo puede producir la rendición de esta plaza que resistía desde casi cuatro años el sitio de las fuerzas terrestres de Buenos Aires. Insiste Brown ante Posadas y el Consejo de Estado sobre la necesaria urgencia de iniciar acciones navales contra Montevideo y logra imponer su criterio.

El 14 de Abril de 1814 zarpa de Buenos Aires la fuerza naval al mando de Brown, que iza su insignia en la fragata "Hércules", y el pueblo de Buenos Aires contempla alborozado su partida.

Las acciones contra la escuadra realista se libran en aguas de Montevideo entre el 14 y el 17 de mayo de 1814, obteniendo Brown una victoria completa. Los realistas incendiaron 2 de sus buques y 5 naves de su escuadra entraron de nuevo a Montevideo.

El triunfo de Brown en este combate trajo aparejada la caída de Montevideo en poder de las fuerzas sitiadoras, hecho que se produce el 23 de junio de 1814. Según San Martín la victoria de Brown en aguas de aquella plaza era "lo más importante hecho por la revolución americana hasta el momento".

Terminada la campaña de 1814 emprende Brown con la fragata "Hércules" que le fuera donada por el gobierno, un crucero por aguas de Chile, Perú, Ecuador y Colombia, que inicia a fines de 1815 y abarca hasta mediados de 1816. Llevó las ideas de libertad de la Revolución de Mayo hasta aquellas regiones y fue precursor de la gesta libertadora que llevaría a cabo San Martín.

"La Escuadra Libertadora parte de Valparaíso hacia Perú"

Cuando regresó a Buenos Aires, no quiso tomar parte en conflictos internos y se retiró a su hogar, dedicándose al comercio.

Corría el año 1825, el Imperio del Brasil, que entonces ocupaba parte del Uruguay, alegando que las Provincias Unidas del Río de la Plata habían apoyado la expedición de los treinta y tres orientales y alentaban a los uruguayos a liberarse de la ocupación brasileña, le declara el 10 de diciembre de ese año la guerra a nuestro país.

El 21 de diciembre de 1825 una escuadra imperial al mando del Vicealmirante Rodrigo José Ferreyra de Lobo bloqueó Buenos Aires. Entonces el gobierno llamó al Almirante y el 12 de enero de 1826 le confirió, con el grado de Coronel Mayor, el mando de la Escuadra integrada por muy escasas fuerzas: los bergantines "General Balcarce" y "General Belgrano" y una vieja lancha cañonera, la "Correntina". Demostró entonces Brown otra faceta brillante de su capacidad: la organización; 12 lanchas cañoneras fueron inmediatamente incorporadas y al poco tiempo se incrementó el número de buques mediante la adquisición de la fragata "25 de Mayo"; los bergantines "Congreso Nacional" y "República Argentina" y las goletas "Sarandí" y "Pepa". El Almirante izó su insignia en la fragata "25 de Mayo".

Las primeras acciones contra la flota brasileña tuvieron lugar el 9 de febrero de 1826. Durante el combate la fragata "Itaparica" buque insignia del almirante brasileño sufrió graves averías y muchas pérdidas de tripulantes.

El 10 de junio de 1826 una poderosa fuerza brasileña se presentó ante Buenos Aires, integrada por 31 barcos. Brown sólo disponía de 4 buques y 7 cañoneras, pero era dueño de ese coraje contagioso que se agranda ante la dificultad, y dirigiéndose a sus tripulantes los arenga con estas palabras:

"Marinos y soldados de la República: ¿Veis esa gran montaña flotante? ¡ Son los 31 buques enemigos! Pero no creáis que vuestro general abriga el menor recelo, pues no duda de vuestro valor y espera que imitaréis a la "25 de Mayo" que será echada a pique antes que rendida.

Camaradas: confianza en la victoria, disciplina y tres vivas a la Patria!"

Momentos después la nave capitana de Brown dio aquella consigna inmortal: "Fuego rasante, que el pueblo nos contempla"

Poco antes de las dos de la tarde se empeñó la acción en toda la línea. Aumentó la angustiosa expectativa de la muchedumbre agolpada en la ribera con la presencia de otras naves que a toda vela acudían al lugar del combate. Era el bravo Rosales que llegaba en ayuda del Almirante con la goleta "Río de la Plata" y lo mismo hacia Nicolás Jorge con el bergantín "General Balcarce". Para facilitar la maniobra de estas dos naves atacó Brown con frágiles cañoneras a uno de los más poderosos buques brasileños, la fragata "Nitcheroy" y al despejarse el humo del combate se vio que la fuerza enemiga se retiraba. Brown ese día recibió del pueblo de Buenos Aires las pruebas más exaltadas de admiración y gratitud.

El Almirante Brown derrochó coraje y audacia sin límites en el combate de Quilmes, librado el 30 de julio de 1826. A bordo de la fragata "25 de Mayo", cuyo Comandante era el Coronel de Marina Tomás Espora, y apoyado por el valiente Rosales con su goleta "Río de la Plata", combatió contra veinte naves enemigas. El buque de Brown soportó un intenso cañoneo y el Almirante que instantes previos al combate había comunicado a los suyos esta consigna: "Es preferible irse a pique antes que rendir el pabellón", se ve obligado a abandonar la "25 de Mayo" que es remolcada a Buenos Aires y sigue la batalla a bordo del bergantín "República". Ante el temor de quedar varadas las naves brasileñas se retiran y la escuadra de Brown empavesada como en días de gala llega al puerto de Buenos Aires.

"Combate de Quilmes"

En febrero de 1827, el Almirante Brown enfrentó al enemigo con una fuerza equivalente en el combate de El Juncal. Esta acción naval terminó con una derrota de las fuerzas brasileñas y en ella tuvieron actuación destacadísima el comandante del bergantín "General Balcarce", Francisco José Seguí, y el comandante de la goleta "Maldonado", Francisco Drummond.

Durante ese combate fueron apresados doce buques brasileños, tres fueron incendiados y únicamente dos pudieron escapar.

El 6 de abril de 1827 el Almirante Brown con una fuerza integrada por los bergantines "República", "Independencia" y "Congreso" y la goleta "Sarandi" zarpó del fondeadero de Los Pozos con el objeto de realizar un crucero sobre las costas brasileñas. Navegaban a la altura de la Ensenada cuando debido a un error del piloto los buques encallaron en la punta del banco de Monte Santiago. En esa situación fueron sorprendidos por fuerzas navales brasileñas muy superiores y durante el 7 y 8 de abril de 1827 debieron soportar un infernal fuego del enemigo. Las naves patriotas causan graves averías en los buques enemigos y resisten hasta que en algunas se carece de municiones. Drummond que era comandante del "Independencia" cae herido mortalmente cuando se dirigía en busca de municiones.

Antes de permitir que la "República" e "Independencia" sean apresadas por el enemigo, Brown ordena incendiarlas luego de pasar a sus tripulaciones a los otros dos buques, y emprende el regreso a Buenos Aires.

En el mes de agosto de 1828 finaliza la guerra contra el Brasil y entonces Brown se retira a la vida privada no queriendo tomar parte en la lucha que durante más de veinte años librarían unitarios y federales. Esa era su intención pero el bloqueo a que es sometido Buenos Aires por parte de las fuerzas inglesas y francesas cuyo comienzo data desde el año 1838 hace que el viejo Almirante vuelva al servicio activo. Comprendía que el pabellón celeste y blanco enfrentaba un peligro y él nuevamente estaba listo para defenderlo.

En el Río de la Plata que había sido escenario de combates en las guerras de la Independencia y contra el Imperio del Brasil, realizó otra vez jornadas de epopeya: bloquearía a Montevideo burlando la flota inglesa; causaría derrota tras derrota a las naves del Uruguay que presidía Rivera que había abierto hostilidades contra Rosas. El 15 de agosto de 1842 el Almirante Brown en aguas del Río Paraná en Costa Brava, derrota a una fuerza naval riverista que era comandada nada menos que por el héroe italiano José Garibaldi. "Déjenlo escapar, ese gringo es un valiente" es la orden que Brown imparte a sus subordinados cuando pretendían perseguirlo para ultimarlo.

Producida la caída del régimen que encabezaba Rosas, muchos marinos fueron eliminados del escalafón activo de la Armada, pero no el Comandante de la Escuadra de la Confederación. Por el contrario, el Ministro de Guerra y Marina le cursa al Almirante Brown una comunicación manifestando: "El Gobierno con esa medida ha consultado la decidida predilección a que V.E. tiene títulos por sus viejos y leales servicios a la República Argentina en las más solemnes épocas de su carrera".

Retirado en su quinta de Barracas fue visitado por Grenfell que había sido su adversario en la guerra contra el Brasil. Al manifestarle aquél cuan ingratas eran las Repúblicas con sus buenos servidores, contestó el anciano Almirante: "Señor Grenfell, no me pesa haber sido útil a la patria de mis hijos; considero superfluos los honores y las riquezas cuando bastan seis pies de tierra para descansar de tantas fatigas y dolores".

El 3 de marzo de 1857 fallece el Almirante Brown y el gobierno decreta honras al ilustre marino que, como decían los considerandos de la resolución oficial "simboliza las glorias navales de la República Argentina y cuya vida ha estado consagrada constantemente al servicio público en las guerras nacionales que ha sostenido nuestra Patria desde la época de la Independencia".

EL PROBLEMA DE LOS ARROYOS ENTUBADOS DE LA CABA

Hace 15 años la legislatura porteña sancionó una Ley que dispone las tareas de infraestructura para los arroyos que circulan desde hace 80 años entubados bajo el subsuelo de la ciudad sean convenientemente modernizados y ampliados en su capacidad.

Los arroyos que se encuentran en ese estado en la CABA son: el Maldonado, el Vega, el Medrano, el White, el Ugarteche, el Erezcano y el Cildañez.

De todos ellos, supuestamente el único que había completado sus reformas era el arroyo Maldonado, recientemente presentado como “LA OBRA” por el GCBA, pero que lamentablemente ante la reciente lluvia “hizo agua” cuando nadie lo esperaba, pero hay que reconocer que en mucho menor medida que tiempo atrás. Luego del último meteoro nos enteramos que van atrasadas.

Habrá que investigar entonces porqué causales el Maldonado vuelve a inundar zonas residenciales, situación que no debería haber acontecido, pero que se repite una vez más. Sería interesante que tome cartas en el asunto la justicia y los organismos de contralor de la ciudad para que verifiquen si las obras de los canales aliviadores presentan fallas estructurales o se han incurrido en negligencias de cualquier otra naturaleza durante las obras, a fin de regularizar la situación a la brevedad.

Ante esta realidad, hoy nos preguntamos cual ha sido la conveniencia de entubarlos en lugar de dejarlos a cielo abierto como sucede en las grandes ciudades europeas e incluso en la Ciudad de Córdoba.

Con referencia a los otros dos arroyos que causan inconvenientes periódicamente el Vega y el Medrano digamos que las obras de estos emprendimientos lamentablemente se encuentran demoradas.

El arroyo Vega recorre los barrios de Villa del Parque, Agronomía, Parque Chas, Villa Ortúzar y Belgrano. El Medrano, nace en el conurbano bonaerense y pasa por los barrios porteños de Saavedra y Núñez.

Para el Vega, el Plan vigente contempla la necesidad de “incrementar la capacidad del emisario actual mediante un túnel aliviador cuyo tramo es de 8,40 kms. de longitud y la construcción de una cámara cilíndrica vertical de descarga que se agota aguas del Río de la Plata.

Para el Medrano, estaba proyectado incrementar la capacidad del emisario principal mediante la construcción de un túnel aliviador de cerca de 5,18 km. de longitud, donde se incluía además la construcción de una obra de cabecera que derivaría caudales del emisario existente.

Pero como siempre quien afirme acabar con las inundaciones de un día para otro, será cuestionado desde el punto de vista técnico, sabemos que hay voces que dicen que pese a haber sido entubados los arroyos al estar en pendiente el agua fluye hacia sus cauces originales cuando las precipitaciones superan los 50 mm.

Frente a esta cantidad de lluvia caída en tan corto plazo, dicen además que no existe sistema de desagüe que soporte estos guarismos y si a esto le sumamos que las alcantarillas y sumideros en su mayoría se encuentran taponadas por la falta de mantenimiento y la falta de conciencia social de todos nosotros.

Hasta el día que se puedan solucionar los graves problemas que históricamente tenemos en la Ciudad de Buenos Aires cada vez que llueve intensamente, todavía vamos a ver pasar mucho agua bajo el puente.

Luis Alberto Mello.

PAGINAS ABRIL 2013- ACTUALIDAD
1 2 3 4 5 INDICE  

 

EDITOR RESPONSABLE:
Luis Alberto Mello.
Nro de inscripción en el Registro Nacional
de la Propiedad Intelectual:
955203
ESTADOS UNIDOS 1819 PB "3" (C1227ABA), Ciudad Autónoma de Buenos Aires
Teléfonos: 011-6380-6821 / celular 15-3226-8012
Mail: buenosaires-ciudadkryptondigital@gmail.com
Envíenos sus comentarios a:
luismello.ckd@hotmail.com

 

 

 

 

© CIUDAD KRYPTON DIGITAL 2008. Todos los derechos reservados. Resol: 1024x768 Design By: ACTIVA100